Que os podría decir que no sepáis, que traslucida es la vida por ese velo que todos llevamos puesto, a costa de nuestra efímera existencia....
Acérrimo creyente de que la felicidad ha de surgir de nosotros, y no de nuestro entorno Si es posible pienso que del exterior , han de surgir pequeños retazos que han de ayudarnos a profundizar en nosotros mismos,toda ayuda es poca para llegar al autoconocimiento y la verdadera felicidad en nuestro pequeño mundo .
Nada que señalar, excepto por centrarnos en un ser y un estar que transcurre por la vida como ese río que nunca para y que aunque su nombre lo ignore, nunca es el mismo...
Barcos sin vela, que a la deriva surcan un mar de soledades, incertidumbres y añoranzas, en espera de poder borrar ese "todo pasado fue mejor" y poder instaurar, al menos por momentos, un presente con pequeños puertos donde amarrar ese estado de felicidad que deslizándose como arena entre nuestros dedos transcurren ante nuestros ojos y dan un poco de color y alegría, haciendo de nuestro día a día un pequeño remanso de paz.
Espejos de almas sensibles que por mero azar se cruzan y se hacen mas fuertes sabiendo, que con voluntad se puede seguir avanzando y sintiendo que lo mejor de la vida, a veces, no esta en todo aquello que soñamos y deseamos, sino en un aquí y un ahora, que aunque efímero, real y sentido, nos hace sentir vivos aunque solo sea en ratos de transito , llenándolos de pequeños momentos de Semifelicidad.
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