Recuerdo de niño , cuando vivía en Suiza, que una de las cosas que mas me impresionaba , eran los Alpes, majestuosos y de valles profundos , dejando ver desde la cima mas blanca , hasta el verde mas oscuro de sus maravillosos valles, pero también recuerdo el miedo y respeto que le cogí a aquellos miradores desde los cuales se podían observar tales paisajes, por que la belleza era tal, que algunos se despistaban del terreno que pisaban y acaban siendo rescatados de una caída que de haberse producido hubiera tenido consecuencias mortales....
Mas tarde en mi tierra, podía ver como rompía el mar en los grandes acantilados, sintiendo su fuerza y perseverancia, pero esa belleza también , suponía sus riesgos , si te acercabas demasiado ....
En mi casa teníamos panales de abejas a la antigua usanza , corcho y madera y me encantaba ver la recolección de la miel, pero ahí ya si se estimaba el peligro desde un principio y se tomaban las precauciones pertinentes, humo y traje para evitar los picotazos, que con toda seguridad se producían....
Toda belleza de la vida, por su propio ser, tiene sus riesgos ocultos, unas veces los sopesamos y medimos para que no nos dañe, otras sin embargo haciendo caso omiso de las advertencias, incluso hechas por nuestros propios sentidos, nos acercamos demasiado y al igual que nos acercamos a la lava, que cuanto mas cerca mas hermosa nos parece, mas nos consume con su intenso calor, dejando marca en nosotros, si nos retiramos a tiempo, o consumiendonos totalmente si no nos retiramos a tiempo....
Consciente soy, de que todo en la vida tiene su porque, aunque la mayoría de las veces ni lo intuimos y lo achacamos a las circunstancias , pero también creo, que si somos lo suficientemente inteligentes, ante cualquier situación, ponernos la coraza y una vez pasado el trance podernos la quitar, que no hacerlo y sufrir en vano, por aquellas consecuencias que pudimos evitar.....
En este gran jardín, donde todo tipo de flores crece, aquellas que son rosas, muestran su belleza, su pasión, su dulzura y a veces su espinas, de nosotros depende saber tratarlas, para que así, solo su belleza disfrutemos y dejen ocultas sus espinas, para aquellos que sin pudor inentan hacerlas suyas llevándose de premio sus espinas en su corazón .....
No hay comentarios:
Publicar un comentario